CSIF Granada lamenta que el paro vuelva a subir y reclama empleo de calidad y un modelo productivo alejado de la estacionalidad del sector servicios

La Central Sindical Independiente y de Funcionarios (CSIF) en Granada, sindicato más representativo en las administraciones públicas y con presencia creciente en el sector privado, ha lamentado el aumento del desempleo durante el pasado mes de octubre en la provincia en un 1,88% con respecto al mes anterior, dejando un total de 73.386 personas en el paro.

La presidenta de CSIF Granada, Victoria Eugenia Pineda, ha subrayado que “si bien octubre suele ser un mes de escasa generación de empleo, arrastramos tres meses consecutivos de subida del desempleo en la provincia con tasas muy por encima de las medias autonómica y nacional, que vuelven a dejar al descubierto la fuerte dependencia de nuestro mercado laboral del sector servicios, donde se ha destruido el 78% de los 1.353 puestos de trabajo perdidos durante el pasado mes de octubre en Granada”.

De este modo, Pineda ha mostrado su preocupación ante el aumento del paro en la provincia según los datos difundidos este viernes por el Ministerio de Trabajo y Economía Social. Por otro lado, la presidenta provincial ha reclamado a los distintos gobiernos “nuevas medidas para frenar tanto el paro juvenil como la brecha de género”. En este sentido, ha destacado que, según los datos conocidos hoy, “en Granada seis de cada diez personas sin empleo son mujeres”, ya que el paro femenino registrado en octubre ha sido del 58% frente al 42% masculino.

La presidenta provincial de CSIF confía en que la provincia pueda cerrar el año por debajo de la barrera de los 70.000 desempleados apostando por fórmulas alternativas que rebajen la dependencia del tejido productivo de Granada del sector servicios y de las campañas agrícolas, como la industria y la innovación.

Además, el sindicato ha vuelto a poner el acento en que la recuperación económica y la reactivación del empleo deben pasar de forma imprescindible por el refuerzo de los servicios públicos básicos como la educación o la sanidad.