LOS SERVICIOS PÚBLICOS SON LA PRIORIDAD

No se puede entender la política de personal que se está llevando desde esta Administración si es que hay alguna. Desde CSIF estamos perplejos e indignados ante lo que está pasando.

Se lanza in extremis una modificación de la instrucción sobre ceses de interinos de 31 de mayo, que daba la posibilidad de mantener muchos empleos necesarios para el funcionamiento de los servicios públicos; los Departamentos se ponen a trabajar contra reloj en informes justificativos para salvaguardar sus servicios, pero que finalmente son todos rechazados, encontrándonos de nuevo en el punto de inicio.

¿Por qué estos bandazos en las decisiones de Función Pública? Las cosas no se arreglan a martillazos para que nos encajen las piezas

 ¿Qué justifica el desmantelamiento de servicios esenciales para la ciudadanía, y de otros muchos también necesarios? ¿No es el fin último de las Administraciones garantizar los servicios públicos y servir al interés general por imperativo del artículo 103.1 de la Constitución?

Las necesidades del servicio están por encima de cualquier otra consideración.

Seamos claros, por mucho que se empeñen, no se va a poder cumplir con el 8% de temporalidad que la Ley 20/2021 de 28 de diciembre marca. Estamos muy por encima todavía y esto no se arregla con despidos indiscriminados de personal temporal.

Tampoco se podrá cumplir con la finalización de procesos selectivos que marca la misma Ley, porque se perdió el tiempo de manera negligente en la anterior legislatura y ahora por mucho que el Gobierno actual haya intentado potenciar el IAAP y sus trabajadores pongan sus mayores esfuerzos en ello, el tiempo no vuelve y ya no se va a poder.

Pero por aquí estamos acostumbrados a ver que la Administración no cumple ningún plazo. Hasta aquí nadie se sorprenderá.

También sabemos que la sentencia del Tribunal de Justicia de la Unión Europea (TJUE) que sugiere convertir en indefinidos a los interinos de larga duración no significará que los muchos trabajadores públicos que están en la administración autonómica en esta situación pasen a ser fijos de forma automática; todo lo contrario los Tribunales españoles del contencioso administrativo no están reconociendo esta posibilidad al menos en lo que se refiere al personal funcionario.

La Ley 20/2021 establece procesos de estabilización con formato concurso-oposición que están en ejecución y un concurso excepcional de méritos con más de 600 plazas en Aragón pendiente de resolver. Retrasados pero en marcha.

También establece una indemnización tasada en el tiempo y en los importes para el personal que haya permanecido más tiempo de lo debido y que no haya podido estabilizar.

Y entonces ¿por qué imponer tozudamente una instrucción con medidas tan severas e injustas en cuanto a ceses de personal interino dejando decenas de plazas vacías, sin posibilidad de ser ocupadas en meses por personal fijo, desmantelando así los servicios públicos en un acto de tanta irresponsabilidad?

¿Qué justifica despedir a una funcionaria interina que comenzó a trabajar el pasado 1 de septiembre como responsable de 18 niños de 2 años en una Escuela Infantil, sabiendo de antemano que la titular de esa plaza no se va incorporar en muchos meses? El lunes 4 de noviembre ¿quién asumirá esa tarea? Y este es solo un ejemplo.

APN,s cesados, gran parte de las plantillas en la Administración periférica en cuadro, plantas enteras de las OCA desiertas, personal de atención directa al público, que gestiona ayudas o subvenciones para el ciudadano, vigilancia de la Salud , atención a nuestros mayores…los servicios provinciales de Educación sin personal.

Un panorama desolador.

¿Todos sacrificados en aras de una estadística? Y si no es así expliquen qué está pasando.

Ahora resulta que los concursos que tanto ha costado que se realizasen en esta Administración con periodicidad, van a tener la culpa del desorden actual. ¿No serán las miles de plazas vacantes de la RPT sin titular porque los procesos selectivos no se han realizado a tiempo?

¿Qué se gana fomentando el malestar y el desánimo de los empleados públicos de esta organización?, el personal fijo sufre también esta desastrosa gestión.

Desde CSIF no vamos a normalizar que una empresa de más de 12.000 empleados siga gestionando sus recursos humanos sin una planificación, a salto de mata, hoy una cosa y mañana otra.

No puede volver a darse esta penosa situación.

Es necesario cambiar muchas cosas con un Plan estratégico de Recursos Humanos que recoja mejoras en puntos tan importantes como:

1 .Selección y reclutamiento del personal empleado público

2. Organización de la plantilla: Puestos de trabajo. Relación ordenada, bien clasificada y bien distribuida de los puestos de trabajo.

3. Carrera administrativa o profesional y movilidad. Sistema técnico que garantice la igualdad de oportunidades en el ascenso y la promoción profesional, así como para permitir su movilidad en las diferentes áreas de la organización.

4. Competencias profesionales y formación adecuada.

5. Dirección pública profesional y no supeditada a los intereses políticos de los Gobiernos de turno. Es necesario gestionar con estabilidad y objetivos a medio y largo plazo.