CSIF denuncia la "vergonzosa" propuesta de la Sindica de Greuges que pone en peligro la seguridad en las prisiones
- Prensa y Comunicación
7 de marzo de 2025

A un año del asesinato de Núria en el Centro Penitenciario de Mas d’Enric, la Sindicatura insta a revocar el veto a presos violentos en lugares de alto riesgo
Barcelona, 7 de marzo de 2025.- El próximo 13 de marzo se cumplirá un año del brutal asesinato de Núria, una trabajadora penitenciaria, cocinera del Centro Penitenciario de Mas d’Enric (Tarragona), quien perdió la vida a manos de un recluso que también desempeñaba labores en la cocina en la prisión. Este trágico episodio puso de manifiesto las graves deficiencias en materia de seguridad dentro de las cárceles catalanas y llevó a la Consejería de Justicia a restringir el acceso de los internos más peligrosos a zonas de alto riesgo, como las cocinas. "La única decisión coherente que ha tomado el conseller Espadaler en estos meses", según CSIF.
Sin embargo, un año después, la Sindicatura de Greuges de Cataluña insta a la Generalitat a revocar ese veto y permitir nuevamente el acceso de presos peligrosos a estos lugares. Lo ha hecho a través del Informe Anual del Mecanismo de Prevención de la Tortura, cuyas conclusiones fueron presentadas este lunes en el Parlament por la síndica Esther Giménez-Salinas.
Para la Central Sindical Independiente y de Funcionarios (CSIF) esta propuesta es "una auténtica vergüenza" y demuestra que la Sindicatura "practica el buenismo con la seguridad, preocupándose solo por los derechos de los presos y olvidándose por completo de los funcionarios penitenciarios”. “Se olvida que también los presos conflictivos agreden a otros presos y se nota que nadie de su familia ha sufrido una agresión grave ni ha perdido a un ser querido a manos de un asesino", denuncia el sindicato. "Estamos ante una nueva muestra de un sistema que está más preocupado por defender al delincuente que por proteger a sus servidores públicos. Una vez más queda públicamente demostrado que el colectivo penitenciario tiene al enemigo en casa".
La Sindicatura de Greuges argumenta que la gravedad de los delitos cometidos por un preso no debería ser un criterio para apartarlo automáticamente de determinados puestos de trabajo, recomendando la readmisión inmediata y con carácter retroactivo de los internos peligrosos en estos espacios. Asimismo, considera que restringir el acceso de presos violentos a utensilios como cuchillos supone "una limitación de sus derechos". Ante esta afirmación, CSIF responde con contundencia: "¿Y perder a un ser querido a manos de un asesino, qué es? Es la restricción al derecho a la vida. ¿Y que un funcionario llegue a casa, tras pasar por el hospital, malherido y con secuelas psicológicas, qué es? Es la restricción del derecho a la seguridad en el trabajo".
La Síndica propone medidas como la instalación de cámaras de vigilancia, arcos detectores de metales, refuerzo de los registros y sujeción de los instrumentos peligrosos a las mesas de trabajo. CSIF considera estas medidas necesarias, pero insiste en que "lo primordial es mantener el veto". "A ver si la Síndica consigue que los Servicios Penitenciarios catalanes implementen estas medidas, que cada día resultan más necesarias".
CSF exige medidas reales de seguridad en las prisiones
El sindicato lanza un llamamiento urgente a la Generalitat y al conseller Espadaler para que dejen de ignorar la situación del colectivo penitenciario y adopten medidas efectivas en términos de seguridad. Entre sus exigencias destacan:
- Que no se modifique ni una coma del veto a los presos violentos en lugares de riesgo.
- Un mayor control sobre asociaciones, observatorios y colectivos hiper subvencionados que solo buscan ensuciar la imagen del colectivo penitenciario.
- Que el conseller Espadaler deje de ser "invisible" y tome medidas efectivas más allá de atar cuchillos a las mesas de trabajo.
- Dotar a los funcionarios de aerosoles de acción adecuada.
- El reconocimiento del personal penitenciario como agentes de la autoridad.
- Suministrar medicación diluida a los multirreincidentes.
- Separar a los internos inadaptados del sistema del resto de la población reclusa que sí cree en la reinserción.
Desde CSIF advierten que continuarán denunciando cualquier intento de menoscabar la seguridad de los trabajadores penitenciarios y exigen que la Generalitat actúe con responsabilidad para evitar que se repitan tragedias como la de Núria. "No permitiremos que la memoria de nuestra compañera quede en el olvido ni que se juegue con la vida de los funcionarios penitenciarios".