Cómo superar los miedos en una entrevista

Escrito por Paula García García 
Psicóloga del Grupo Salud G&G

El miedo emocional es una respuesta natural del cuerpo ante una situación desconocida. Su función es indicarnos que nos falta información. A diferencia del miedo físico que nos indica la posibilidad de un peligro. Es importante interpretar bien nuestras emociones, ya que la forma de calmarla será diferente.

Muchas veces la cabeza trata de buscar información a través de la imaginación, colocándonos en el peor escenario y haciéndonos experimentar cómo lo sentiríamos y resolveríamos si esa situación se diera: este fenómeno se llama ENSAYO PSICOLÓGICO. En ciertas ocasiones este mecanismo de defensa puede ser muy útil, pero en el caso de una entrevista de trabajo puede aumentar nuestra sensación de miedo, generando síntomas de ansiedad que nos hagan transmitir un mensaje erróneo a la persona que nos entrevista.

CINCO TIPS PARA MANEJAR EL MIEDO EN UNA ENTREVISTA

1. Saludo: Respeta los tiempos del entrevistador y deja que sea él o ella quien determine qué tipo de saludo y contacto quiere. Si nos precipitamos, puede tener lugar situaciones tensas. DÉJATE GUIAR.
2. Valora tu experiencia profesional: En muchas ocasiones obviamos o consideramos las prácticas o trabajos breves como trabajos de menor valor o menor importancia. Cuando son una de las experiencias profesionales donde más ganas y aprendizaje has adquirido. Si tú las respetas, las defiendes como experiencia laboral, evitando justificar con “bueno eran prácticas”, los entrevistadores también lo harán y aumentarás tus posibilidades de continuar en el proceso de selección.
3. Usa tus circunstancias como fuente de sabiduría: nuestras situaciones personales a veces nos hacen sentir inseguros/as por el miedo a ser juzgados o rechazados por la presencia de ellas, como puede ser tener personas a nuestro cargo o nuestra edad. Debemos ver estas circunstancias como habilidades en nuestro favor: tener personas a nuestro cargo es una fuente de formación en organización, coordinación, gestión de personas y economía del tiempo, y nuestra edad, si somos mayores será, una fuente de experiencia, herramientas de adaptación y conocimientos, y si somos jóvenes, una fuente de actualización, ilusión y energía. Si defendemos nuestras situaciones desde lo que nos enseñan y lo relacionamos con cosas que pudieran ser útiles en ese puesto de trabajo, tendremos una ventaja frente a otros candidatos.
4. Lenguaje no verbal: es importante conocer cómo se expresa nuestro cuerpo en situaciones de tensión o incomodidad. Lo más habitual suelen ser picores, agitación motora y tics. Para el manejo de esta expresión corporal podemos realizar técnicas de relajación como la relajación muscular progresiva de Jacobson, hacer respiraciones y tener nuestras manos ocupadas con un bolígrafo o carpeta.
5. Cuida la imagen que tienes de ti mism@: el ser humano es un ser proyectivo, esto significa que la forma en que nos vemos y sentimos la volcamos y transmitimos hacia el exterior. Por lo tanto, si yo me siento insuficiente o un/a impostor/a transmitiré miedo e inseguridad. Por el contrario, si siento que soy válido/a y un/a buen/a candidato/a, transmitiré seguridad y serenidad. Las terapias psicológicas son la mejor forma de análisis y mejora de la autoestima.

Y recuerda, DEFIENDE TUS CUALIDADES, HÁBLATE Y RESPÉTATE COMO LO HARÍAS CON LA PERSONA QUE MÁS ADMIRAS O QUIERES.