CONCURSO DE TRASLADO EN ANDALUCÍA Un nuevo desprecio del Consejero José Antonio Nieto hacia los trabajadores de justicia en Andalucía

Por el Servicio de Recurso Humanos de la Secretaría General de Servicios Judiciales se nos ha remitido la relación de plazas que se convocarán a concurso de traslado en Andalucía, y que en archivo adjunto se acompañan a esta información.

La decisión de la administración de no convocar las plazas desiertas en el concurso de traslado, ignorando además la recomendación explícita del Ministerio de Justicia, constituye una muestra más del desprecio constante del Consejero José Antonio Nieto hacia sus propios trabajadores. Aunque presume de ser “el Consejero de todos”, queda claro que su verdadera lealtad parece dirigirse únicamente a quienes portan toga, mientras que los empleados que sostienen día a día el sistema judicial andaluz son relegados y menospreciados. Los hechos hablan por sí solos.

Esta decisión arbitraria no solo lesiona gravemente a los trabajadores, quienes tenían legítimas expectativas de mejorar sus condiciones laborales, sino que también refleja una alarmante falta de planificación, transparencia y compromiso con la justicia pública en Andalucía.

Resulta igualmente inaceptable la falta de transparencia de la Secretaría General de Servicios Judiciales, que ha negado la solicitud de CSIF realizada en el día de ayer en la mesa sectorial de acceso a la relación completa de plazas desiertas por cuerpos en Andalucía. Este secretismo no solo impide un análisis riguroso sobre qué plazas deberían reservarse para procesos selectivos y cuáles podrían ofertarse, sino que además refuerza la percepción de arbitrariedad y de una falta de interés absoluto por las necesidades y demandas reales del personal de justicia.

Exigimos que la Secretaría General de Servicios Judiciales rectifique de inmediato esta lamentable decisión. Es imprescindible que se realice un análisis serio y transparente de las plazas desiertas y que se proceda a convocarlas todas en igualdad de condiciones, siguiendo el ejemplo del Ministerio de Justicia y otras Comunidades Autónomas. Solo así se podrá restablecer una mínima confianza en esa Consejería y ofrecer a los trabajadores de justicia la movilidad y el desarrollo profesional que merecen.

El servicio público de justicia en Andalucía no puede permitirse seguir siendo víctima de decisiones que priorizan la improvisación sobre el sentido común. Es hora de que las palabras del Consejero y su equipo se traduzcan en hechos reales y en un verdadero respeto hacia quienes sostienen el sistema judicial desde la base.