CSIF reclama a la Junta la incorporación de profesionales con perfiles específicos al sistema educativo para poner el foco en la prevención frente al acoso y la violencia

• Coincidiendo con el Día Mundial de la Infancia, la organización pide un compromiso del Ejecutivo para desarrollar estrategias que permitan afrontar la nueva realidad de los menores andaluces
• Solicita crear un servicio especializado para adicciones digitales, que parta de la Consejería de Inclusión Social y en coordinación con servicios específicos en las áreas asistenciales y hospitalarias

La Central Sindical Independiente y de Funcionarios (CSIF) en Andalucía, sindicato más representativo en las administraciones públicas y con presencia creciente en la empresa privada, ha reclamado a la Administración andaluza la incorporación al sistema educativo de profesionales con perfiles específicos para poner el foco en la prevención frente al acoso, la violencia y otras problemáticas que afectan a los menores.

Coincidiendo con la celebración este miércoles del Día Mundial de la Infancia, la central sindical ha solicitado un compromiso firme del ejecutivo para poner en marcha estrategias y recursos formativos para afrontar la nueva realidad en la que viven los menores andaluces, haciendo del sistema educativo una plataforma de oportunidades para la transformación y que no se centre en la intervención como hasta el momento.  

La vicepresidenta y secretaria de Igualdad de CSIF Andalucía, Yolanda Salgado, ha manifestado la necesidad de que estos profesionales con formación específica puedan desarrollar su actividad docente como una asignatura más y no como algo excepcional. Además, “es urgente una legislación capaz de regular y poner límites al mundo digital, ya que detrás de sus ventajas se esconde un entorno hostil, donde se producen estafas, agresiones y se alimentan las mentiras”, ha señalado Salgado.

Los menores acceden al mundo digitalizado desde edades cada vez más tempranas y sin establecer herramientas que los protejan, lo que provoca que “las conductas negativas del acceso a Internet se normalicen, sin que las familias ni la sociedad en general estemos preparados para dar respuesta”, ha explicado la dirigente sindical, quien recuerda que solo 3 de cada 10 menores en Andalucía tienen limitadas las horas de conexión a Internet y 1 de cada 3 no cree que sea delito enviar fotos de carácter sexual.

Para la central sindical la educación debe ir destinada a que los menores tomen conciencia de la importancia del lenguaje, de cómo nos comunicamos con el otro, a que una agresión no abarca sólo lo físico, a controlar la frustración, a valorar, al sentido del esfuerzo y la constancia y a tener paciencia. “Estos son los cimientos esenciales para construir la sociedad del futuro, lejos de los casos de violencia de género, de la violencia digital y del elevado número de menores infractores”, ha señalado Salgado.

Las mermadas plantillas de docentes, las ratios por encima de lo recomendable y la elevada carga burocrática que asfixia a los docentes andaluces hace que el sistema educativo actual “no responda como debiera a la nueva problemática que acecha a los menores andaluces y, sobre todo, al alumnado con necesidades específicas de apoyo educativo, cada vez más numeroso y cuya atención queda muy lejos de una educación integral y personalizada que merecen”.

La dirigente sindical ha reclamado al Ejecutivo andaluz la creación de un servicio especializado para adicciones digitales, que parta de la Consejería de Inclusión Social, Juventud, Familias e Igualdad, y que esté coordinado con los servicios específicos en las áreas asistenciales y hospitalarias. Salgado ha recodado que la Comunidad de Madrid ya cuenta desde hace más de una década con este servicio y registra una elevada demanda social, además de unos resultados muy positivos. 

Conductas suicidas

Asimismo, CSIF ha mostrado su preocupación por la conductas suicidas de los menores, que en el 61% de los casos se asocian a la violencia derivada del acoso escolar que sufren y del ciberbullying; y en un 27% a aspectos derivados de la salud mental y que generan autolesiones, depresión, ansiedad y problemas de conductas. Precisamente, uno de cada cuatro menores de 18 años sufre algún tipo de trastorno mental, una cifra que se agudizó con la pandemia.

Por último, Salgado ha destacado que “no podemos olvidar las consecuencias de la violencia de género en nuestros menores”. El número de huérfanos por violencia machista se eleva a cinco en Andalucía en 2024 y son numerosas las consecuencias negativas y los traumas que provoca en los niños y niñas la pérdida de una madre, y más en circunstancias violentas.  En este punto, además de intensificar las medidas para erradicar esta lacra social, la vicepresidenta de CSIF-A ha demandado un incremento del número de profesionales con perfiles específicos en el sistema público para tratar el drama que padecen las victimas menores.