HUELGA EN JUSTICIA

En medio de una batalla por nuestros derechos laborales y un sistema de justicia más equitativo, los funcionarios de justicia llevamos siete semanas en huelga. Nuestra voz ha sido ignorada por la Ministra de Justicia, Pilar LLop, quien se ha negado a recibirnos y escuchar nuestras demandas legítimas. Ante esta indiferencia, hemos decidido realizar una donación de sangre simbólica, una acción poderosa que destaca nuestro compromiso y nuestra incansable lucha por la justicia.
Los funcionarios de justicia somos el pilar fundamental de nuestro sistema judicial, 45.000 hombres y mujeres que trabajamos arduamente para garantizar que la ley se aplique de manera justa y equitativa y para proteger los derechos y libertades fundamentales de la ciudadanía. Sin embargo, nos enfrentamos a condiciones laborales precarias, una carga de trabajo abrumadora y una falta de reconocimiento por nuestra labor.
La Ministra de Justicia tiene la responsabilidad de escucharnos y abordar nuestras legítimas preocupaciones. La negativa de recibirnos y dialogar demuestra una total falta de empatía y de compromiso para resolver los problemas que afectan a quienes se dedican a garantizar la justicia en nuestro país. La Ministra no puede ignorar las voces de aquellos que somos fundamentales para el funcionamiento de nuestro sistema judicial.
La donación de sangre simbólica es un gesto poderoso y conmovedor de solidaridad y sacrificio por parte de los funcionarios de justicia en huelga. Con esta acción, buscamos llamar la atención sobre nuestra lucha, no solo como individuos, sino también en representación de todos los ciudadanos que anhelan un sistema judicial justo y transparente.
La donación de sangre simbólica también resalta el hecho de que cada día ponemos literalmente nuestra sangre, sudor y lágrimas en nuestro trabajo. Nuestra dedicación y compromiso son inquebrantables, a pesar de las condiciones adversas en las que nos encontramos. Merecemos ser valorados y apreciados por la labor que realizamos.
Es imperativo que la Ministra abra las puertas al diálogo y atienda nuestras preocupaciones. Solo a través del diálogo constructivo y la voluntad de encontrar soluciones se podrá avanzar hacia un sistema de justicia más justo y eficiente.
Nuestra HUELGA es un recordatorio de que la justicia no puede ser sacrificada ni ignorada. Debemos unirnos y alzar nuestras voces. El momento de actuar es ahora. La justicia no puede esperar más tiempo.